Coliseo.
Tanto el público como los concursantes —ya fuese en las gradas o en las salas subterráneas— quedaron boquiabiertos tras ver los resultados de la primera batalla.
"¡Es increíble!" anunció Anaxandra. "¡Augvag ha derrotado él solo a los cinco miembros de Unlimited Balds, y apenas ha recibido daño!"
El único que permanecía en pie en el cuadrilátero era el sacerdote del Génesis, quien acababa de lograr una auténtica hazaña al vencer a todos sus contrincantes.
"Es increíble", comentó Marco desde la sala subterránea, donde se encontraba con sus compañeros.
"Uno tras otro fueron cayendo como moscas... Ojalá poder hacer lo mismo", sonrió Ashley, con ideas rondando por su mente.
"Aunque lo más sorprendente fue esa magia que usó..." añadió Hansel. "No había visto nada parecido."
"Era algo tétrica, pero con ese aspecto... le queda que ni pintada", comentó Cecily.
"Ahora lo importante es seguir disfrutando de los combates hasta que llegue el turno de nuestro bloque", dijo Ryan, tomando asiento en uno de los bancos mientras se comía una manzana.
"Sí... Continuemos observando", asintió Marco, muy atento a sus futuros contrincantes.
Y así, con los ojos bien abiertos, nuestros protagonistas presenciaron todos los combates del primer grupo. Sin duda, quienes más captaron la atención del público —y de las casas de apuestas— fueron los sacerdotes del Génesis.
Anaxandra pidió con dulzura que los siguientes en entrar fueran los grupos del bloque B, quienes salieron a medida que se marchaban los ganadores del bloque A. Tras realizar el sorteo de los combates, las batallas comenzaron a sucederse con rapidez para poder completar la jornada a tiempo.
En el primer enfrentamiento, uno de los equipos se retiró por miedo a enfrentarse a sus oponentes. En el segundo, el combate fue mucho más igualado y se decidió entre los dos últimos luchadores que quedaron en pie. El tercero fue una victoria aplastante por parte de uno de los bandos.
Ahora era el turno de los dos últimos equipos del bloque B: Steel Phantom y Ursupia.
El líder del primer equipo era aquel musculoso extravagante con el que se habían topado en la sala de espera durante la eliminatoria. Decidió comenzar como el primer luchador de su equipo, dispuesto a demostrar de lo que eran capaces.
"¡Muy bien! ¡El primer combate será entre Terón de Steel Phantom contra Misucula de Ursupia!" anunció la presentadora, mientras en el cuadrilátero subían el corpulento guerrero y la rubia del equipo rival.
"¿¡Terón!?" se sorprendió Hansel.
"¿Qué ocurre?" preguntó Ashley.
"¡Ahora entiendo por qué me sonaba su aspecto...!" exclamó el gemelo, tragando saliva. "Es una de las leyendas militares de la última década. Su magia de potenciación física está centrada en la defensa... ¡Le llaman el hombre que nunca ha sido derrotado!"
"¿Y cómo es eso?" preguntó Ryan, intrigado.
"Ashley utiliza su magia para mejorar sus atributos ofensivos, pero él lo hace para aumentar su defensa. Ha llegado a un punto donde ni una espada puede rasgarle...", explicó Hansel. "Era muy famoso en mi país. Una auténtica leyenda. Pero sólo lo vi en persona un par de veces... por eso no le reconocí antes."
"¿Es tan fuerte?" dijo Marco.
"Parecerlo, lo parece, al menos", suspiró Cecily.
"Demasiado... Me atrevería a decir que podría ser el número uno entre todos los concursantes. No creo que nadie pueda hacerle daño", admitió Hansel con voz tensa.
"¿Es para tanto?" preguntó Ryan, algo incrédulo.
"Para que Hansel se ponga así... imagino que sí. No suele mentir", comentó Ashley.
"¡Mirad!", señaló de pronto hacia la pantalla.
Misucula estaba usando su magia de tierra para lanzar varios ataques a Terón. Sin embargo, ninguno le hacía el menor daño.
"¡Maldito!" gritó, mientras disparaba pedruscos de todos los tamaños, que golpeaban al contrincante.
El tiempo pasaba. Terón no movía ni un solo dedo. En cambio, Misucula estaba agotada, empapada en sudor. Llevaba más de diez minutos atacando sin descanso, y su energía mágica estaba casi agotada. Y no parecía que eso fuera a cambiar pronto.
El líder de Ursupia, al ver que no conseguirían nada, tomó la decisión más sensata: lanzó una toalla blanca al cuadrilátero como símbolo de rendición.
"¡Ursupia se rinde!" anunció Anaxandra. "¡Los ganadores son los Steel Phantom, gracias a Terón!"
El público estalló en vítores y aplausos.
"Increíble... Ni un mísero rasguño", comentó Cecily, sin apartar la vista de la pantalla.
"Ya os lo dije", murmuró Hansel. "Ese tío... es indestructible."
Fue entonces cuando alguien llamó a la puerta. Era uno de los encargados del torneo: venía a buscarles. Había llegado el turno de su bloque.
"Vamos", dijo Marco, con decisión en la mirada.
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Dimensión de Cassmin
Keipi, sin camiseta, completamente descalzo y con heridas por todo el cuerpo, corría sobre un estrecho pilar de hielo. A su alrededor, un dragón de agua giraba protegiéndolo de los proyectiles gélidos que su contrincante lanzaba sin cesar, mientras sus espadas chocaban con furia.
"¡Vamos, Keichiro! ¡Ni siquiera me he puesto seria!" exclamó su entrenadora, retrocediendo de un ágil salto con una sonrisa desafiante.
"¡Tsk! ¡No me subestimes, Yumeki!" gritó Keipi, lanzando al dragón a toda velocidad hacia ella.
Con un solo movimiento de su espada, la espadachina congeló a la criatura y apareció frente a él como un destello. De una potente patada, lo golpeó en la cara y lo mandó volando hacia la base del pilar: un lago que se extendía como un espejo roto.
El joven quedó flotando en la superficie, jadeando, con la nariz sangrando y los brazos abiertos. Su cuerpo estaba al límite.
"Joder... No hay manera de asestarle un mísero golpe", murmuró con frustración.
"No te preocupes. Cada vez estás más cerca", le dijo Priscilla, comunicándose telepáticamente.
Yumeki se impulsó con gracia desde su pilar de hielo y aterrizó en la costa, enfundando su katana sin mirar atrás.
"Por hoy hemos terminado. Tendrás veinticuatro horas de reposo antes de continuar. Si te pillo usando magia antes de tiempo... te corto una pierna", dijo sin rodeos.
"¡Sí, señora!" respondió Keipi, nadando hacia la orilla como pudo.
"Es toda una sargento", comentó Priscilla.
"Sí... Pero, pese a todo, siento que me estoy haciendo más fuerte. Algo dentro de mí me dice... que pronto podré usar a Kaito", dijo mientras se dejaba caer boca arriba sobre el césped que rodeaba la estructura acuática.
"Sí... Yo también lo creo", le animó Priscilla con una sonrisa en su voz.
Keipi cerró los ojos, exhausto, pero con una leve sonrisa en los labios.
"Marco... Ashley... chicos... esperadme... muy pronto iré..."
Y se quedó en silencio, dejando que el descanso curara sus heridas.
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Coliseo.
Los equipos del bloque C llegaron a la arena, colocándose en sus posiciones mientras esperaban el sorteo de combates del día.
"¡Ahí están nuestros chicos!" exclamó Lily desde las gradas, señalándolos con entusiasmo.
"¡Míralos! ¡Qué ganas de verlos en acción!" comentó Theo, rebosante de emoción.
En la pantalla principal aparecieron los emparejamientos. Nuestros protagonistas, los Emerald Paladins, combatirían en segundo lugar contra los Motor Rangers.
Desde su posición en la arena, el grupo observó atentamente el primer combate, que enfrentaba a los dos primeros equipos. El vencedor fue el grupo que se hacía llamar Symphoniacs, liderados por una valiente y poderosa diva conocida como Melodía.
"Parece fuerte..." murmuró Ashley.
"Pero no será ningún problema para nosotros", respondió Marco con confianza.
Una vez que ambos equipos abandonaron el cuadrilátero, Anaxandra llamó a los siguientes.
"¡Que den un paso al frente los Emerald Paladins, que se enfrentarán a los Motor Rangers!" anunció con energía.
Nuestros protagonistas se acercaron a su lateral del campo, mientras los oponentes —todos vestidos como moteros y con cascos llamativos— tomaban su posición en el lado contrario.
De pronto, la presentadora dirigió su mirada hacia los Emerald Paladins, y se quedó completamente boquiabierta al ver uno de los rostros.
"¿Gre–Gretel?" pensó al fijarse en Hansel. "No... Es imposible. Aunque se parecen, este tiene una mirada más afilada... Debe de ser el hermano del que hablaba aquella demonio." Permaneció pensativa mientras los equipos elegían a sus primeros combatientes. "¿Debería... pedirles ayuda?"
Uno de los Motor Rangers, con un casco naranja, fue el primero en subir al cuadrilátero. Pero antes de que Marco pudiera decir algo, Ashley dio un salto al frente, interrumpiéndolos con una sonrisa burlona.
"¡Lo siento, chicos! ¡Voy yo primero!" exclamó, sacándoles la lengua.
"¡Ashley!" protestó Cecily, sorprendida.
"Esta tía..." murmuró Ryan, cruzándose de brazos.
"Lo siento, pero no pienso quedarme atrás después de lo que hizo el rarito del bloque A", dijo Ashley con una sonrisa desafiante. "Así que... me voy a encargar de estos cuatro moteros yo solita."
"¿Tú sola?" preguntó el motero de casco naranja, molesto.
"¡Del equipo Emerald Paladins tenemos a Ashley, y por parte de los Motor Rangers a Monkino!" anunció Anaxandra, regresando a la realidad y esforzándose por mantener la compostura para no llamar la atención de su madre. "¡Que comience el combate!"
"Vamos... ¡Os voy a machacar!" sonrió nuestra protagonista con confianza, apretando el puño.
Continuará...
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